"Toc, toc. ¿Quién es? La enciclopedia Encarta del universo."
Comedia Galáctica, elementos de ciencia ficción por doquier, energía de la improbabilidad, robots, extinción, sentido de la vida, un must imprescindible para los amantes del universo.
Esta saga ha estado en mi punto de mira durante varios años, había escuchado de ella y como amante de la ciencia ficción que soy tenía que caer algún día, pues por fin ha llegado ese día y no ha decepcionado.
Sorpresa tras sorpresa, en las primeras hojas de este libro ya te encuentras una demostración de intenciones por parte del autor (Douglas Adams) destruyendo el planeta Tierra a causa de que interfiere en los planes del jefe de obra de una autopista galáctica y por supuesto sobra en el camino. El universo es muy grande y no somos más que una mota de polvo que molesta, realidades como puños.
Resulta que durante los años anteriores a la demolición estos alienígenas han ido avisando constantemente a la especie predominante en la Tierra, sobre la destrucción de la misma para que se... apartasen del camino. ¿Pero por qué no hemos recibido nada? Quizá porque nosotros no somos la especie predominante, sino una más del planeta, los ratones y delfines son la raza culmen según ellos, durante años llevan avisándonos y comunicándose con nosotros con bailes y excentricidades, pero han acabado rindiéndose ante nuestra total ignorancia y aceptando el destino mortal que nos aguarda a todos.
Este es el nivel que iremos descubriendo en este libro, factores que no esperas, locuras impensables y elementos ficticios la mar de imaginativos y graciosos, pues el tono de "La guía del autoestopista galáctico" es totalmente la comedia, dándole un toque menos realista y viviendo con más pasión las locuras galácticas que irán encontrando nuestro grupo de errantes espaciales.
Contiene una originalidad atrapante, personajes pintorescos, distintas razas curiosas con su personalidad e historia propia y un universo inmensamente vacío y a la vez tan vivo el cual puede aportarnos una cantidad de historias infinitas que disfrutar.
La improbabilidad como energía y combustible para viajes interestelares, posiblemente la idea más surrealista y locamente divertida que abrirá un abanico de posibilidades increíble e inimaginables. No puedes esperarte lo que te ofrece, de ahí su nombre. Con este elemento en juego en la nave de nuestro grupo las posibilidades que está saga puede aportarnos son magistrales.
Por desgracia para mi sorpresa, cuando me quedaban unas 100 páginas para terminar el libro (está edición) resulta que finaliza inesperadamente la historia dejando un final abierto que seguirá en los cinco libros de los que se compone la obra. Parece ser que esta editorial ha añadido un extra de casi 100 páginas sobre la adaptación a película que hicieron sobre este libro (no he visto la película, pero parece que no triunfo mucho).
Razón por la cual se me ha quedado corto, me he quedado con ganas de más la verdad, ha sido muy ameno y divertido pero que carece de una trama trabajada o una historia interesante. Una locura cósmica que me ha recordado bastante a la trilogía de la Fundación, por lo original y creativa que es a la hora de crear ciencia ficción.
La segunda parte será compra asegurada y si consigue seguir sorprendiéndome terminaré la saga completa, pues es uno de sus mejores atractivos. Si eres fan de la literatura sobre ciencia ficción tendría que tener un hueco en tu librería, pero si esperas una buena historia o una narrativa excepcional, posiblemente te decepcione pues es un libro simple sin aspirar a contentar a todos los públicos.
Mi puntuación es: 5,5
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